Llega el frío: compra un calefactor eléctrico para chimenea
Llega el frío: compra un calefactor eléctrico para chimenea
La chimenea eléctrica radiante es una novedad que lleva tiempo causando sensación. Combina la eficacia de un radiador con la comodidad de una chimenea, sin riesgos. Veamos en qué consiste y por qué deberías planteártelo seriamente para calentar tu casa.
¿Qué es una chimenea eléctrica radiante?
Muchos soñamos con un fuego acogedor cuando el invierno es más frío. Sin embargo, en un piso esto es imposible, y en una casa moderna significa tener que realizar obras muy costosas.
¡Pero eso sin tener en cuenta la chimenea radiador eléctrica! Esta pequeña joya de la tecnología es, de hecho, un radiador eléctrico de diseño con llamas realistas en la parte frontal. Es como estar en un chalet en la montaña, ¡con troncos crepitando en la chimenea!
De hecho, es un radiador eléctrico con un panel de cristal templado de 6 mm delante. Todo ello se combina con una pantalla LED de muy alta calidad que proporciona un efecto muy bonito y realista. La apariencia puede tener varios niveles de diseño y realismo.
¿Por qué es bueno?
Este tipo de instalación combina todas las ventajas de los dos sistemas, al tiempo que elimina los inconvenientes.
Es un calentador eléctrico, por lo que es muy eficiente. En algunos modelos, el radiador sólo calienta la parte delantera, por lo que no hay pérdidas de calor.
Así podrás encenderla y apagarla muy rápidamente, lo que no ocurre en absoluto con una chimenea. Seguro que recuerdas haberlo intentado tres veces antes de conseguir encender la barbacoa en verano, ¡pero ahora puedes ahorrarte el calvario cada noche!
También evitas todos los riesgos asociados al fuego. Las llamas son puramente ficticias, por lo que no hay riesgo de que se incendie el conducto de humos o salgan chispas del hogar. Lo único que queda es el calor. Además, algunos fabricantes como Chemin’art mantienen fría la placa frontal. Así no hay riesgo de que los niños se quemen al tocarla.
También hay un modo de ahorro de energía para que las llamas sólo aparezcan, sin calentarse. Es más, puedes utilizar un mando a distancia para ajustar la intensidad del calor y las llamas que aparecen, y a veces incluso el color de las llamas. Así tendrás una bonita chimenea sin tener que comprar leña, cortarla y almacenarla. Esto ahorra energía, tiempo y dinero.
La instalación es extremadamente rápida. Para algunos modelos, sólo se tarda 10 minutos y no requiere ningún tipo de trabajo. Además, no requieren ningún mantenimiento especial y no producen polvo, humos ni olores.
¿Cuáles son los distintos tipos de chimeneas radiantes?
Las chimeneas eléctricas se pueden adaptar a tu casa, y hay muchos modelos diferentes para todos los gustos.
Hay chimeneas móviles, que suelen ser más pequeñas. Son ideales para pisos pequeños o estudios. Calientan zonas más pequeñas, pero dan el mismo caché que un fuego de leña.
Otros modelos son especialmente decorativos. Están diseñados de la misma forma que un marco de fotos, pero son más planos y se colocan en la pared. A veces son muy grandes y pueden adornar con elegancia una pared muy grande.
Algunos modelos también son empotrables. Esto significa que pueden instalarse en una chimenea que se ha bloqueado pero donde ha quedado el soporte, en un hueco de la pared o en un mueble. Sólo calientan por la parte frontal, por lo que no hay pérdida de calor en la zona cerrada, ni riesgo de sobrecalentamiento.
Por último, hay otras que pueden colocarse solas. Pueden estar rodeadas por una decoración que recuerde a una chimenea más tradicional, o por un mueble.
Cada uno de estos modelos viene en todos los tamaños, apariencias y categorías de precio. Para tomar una decisión, debes tener en cuenta el tamaño de la habitación que vas a calentar, el estilo que quieres darle y el precio que quieres pagar por ella.
Los objetos de diseño pueden parecer un poco fríos de vez en cuando, pero no es el caso de estas chimeneas eléctricas con radiador. Con el invierno a la vuelta de la esquina, son un bienvenido consuelo.
