El radiador eléctrico: Eficacia calorífica y diseño perfecto
Los radiadores eléctricos han recorrido un largo camino desde que se introdujeron por primera vez. Antes eran temidos por su consumo energético. La tecnología actual los convierte en el aparato de calefacción preferido por sus cualidades de ahorro energético y por la facilidad con que se integran en cualquier decoración.
El radiador eléctrico: un objeto decorativo con clase
El radiador eléctrico se ha convertido en un elemento decorativo del hogar. El radiador eléctrico de chimenea, un concepto contemporáneo, es un bienvenido sustituto de la chimenea humeante que desprendía el acre olor de la madera quemada. Concebido y diseñado para adaptarse a todas las estancias de la casa, puede utilizarse en el salón para aportar calidez y elegancia, o en el cuarto de baño para crear un ambiente acogedor.
Radiadores eléctricos: una amplia gama de modelos para cada habitación
Hay muchos modelos diferentes de radiadores eléctricos. Todos cumplen las normas de seguridad vigentes. En el baño o el dormitorio, el radiador de inercia seca difunde un calor suave sin resecar el aire ambiente. En el salón, el diseño rivaliza con la eficacia. Con un elegante frontal de cristal templado tintado en negro o un frontal de cristal templado iluminado en blanco, los radiadores decorativos chemin’arte con pantalla táctil LCD son objetos decorativos con clase para tu hogar.
Radiadores eléctricos: el aparato de calefacción adecuado para cada habitación
Los radiadores eléctricos decorativos pueden utilizarse de muchas formas distintas. Pero no se olvidan de su robustez y potencia calorífica. Desde el radiador de 425 W con elementos calefactores de silicato cálcico para cuartos de baño y habitaciones pequeñas hasta el radiador de 2.000 W con elementos calefactores de acero para el salón, todos los radiadores están diseñados para proporcionar el máximo confort y, al mismo tiempo, preservar el presupuesto doméstico.
